Hay veces que yo me pregunto, ¿Por qué si las niñas son más aplicadas y más dedicadas en la escuela que los hombres, hay tan pocas niñas que juegan ajedrez en comparación a la de los hombres?

El otro día estaba leyendo un artículo en donde el autor dijo que las niñas no jugaban tanto al ajedrez, por cuestiones de moda. De alguna manera esto es cierto, pues la verdad es que no hay muchas exponentes del ajedrez en el mundo (a comparación con los hombres). Otro de los factores, es que la etapa de la vida por la que pasan las niñas como de los 10 a los 15 años es compleja.

Siendo realistas, a esa edad, prefieren otras cosas que jugar ajedrez, prefieren estar un buen rato del día en las redes sociales, prefieren andar en fiestas, reuniones, buscando novio, etc. Sin embargo, no sólo es con las mujeres, sino también con los hombres pasa lo mismo, pero pues está bien, es parte de la vida. 😛

Escribo este artículo porque tengo algunos años jugando para el INDE, asistiendo a los regionales, etc. Y lo curioso del caso, es que muchas de las jugadoras de nuestro estado, sólo asisten a un regional y ya no vuelven a jugar al ajedrez, seguramente por la falta de resultados positivos. Realmente esto es una lástima. Yo creo que lo más importante en esos casos, es el apoyo de los padres de familia.

Duif Calvin puntualiza que el fenómeno que se produce en las niñas que dejan, tanto el ajedrez como las matemáticas y las ciencias, a los 12 años, (descripto en el libro de Nikki Marone «Cómo ser padre de una hija exitosa»), tiene que ver con la función del padre en la conducción de esas niñas.

El viernes pasado, fui al lugar en donde estudié mi primaria y secundaria, el Instituto Rebsamen. Es una excelente escuela y dos de mis amigos de la secundaria, también entraron al CIDEB, entonces, nos pusimos de acuerdo para visitar a los maestros y a algunos amigos de grados inferiores. 😛 Antes del recreo de los niños de primaria, saqué el ajedrez y me puse a jugar con mis amigos, ya cuando llegó la hora del recreo, pues se acercaron muchos niños a vernos jugar.

Lo que más me llamó la atención, fue que entre todo ese grupito de niños, había una niña de unos 6 años que sabía jugar al ajedrez y como se puede ver en la foto, pues ella estaba jugando contra mi amigo de 15 años, jajaja. La verdad es que mi amigo es un poco malo en ajedrez, pero aún así, logró ganarle a la niña de 6 años.

En lo personal, me dio mucho gusto ver a esa niña que sabía jugar, sabía mover todas las piezas, sabía capturar a otras piezas, sabía cuando su rey estaba en peligro, etc. Y pues yo sé que aquí en Nuevo León hay talento, hay muchas niñas que juegan muy bien. Y pues como dice el comercial… «Hay talento, sólo falta apoyarlo» 😛

Por último, invito a todos los padres de familia que leen este blog, a que apoyen a sus hijas o hijos. La verdad es que el ajedrez tiene muchos beneficios, es una buena herramienta para la formación integral.